domingo, 30 de diciembre de 2007

Cuatro Caminos

Camino 3. Sur

Algo he perdido, tengo mis memorias, tengo mi dolor, tengo la sensación de nunca haber estado aquí. Algo he perdido, porque siento la ausencia y la luz se hace más tenue, todo se aleja.

Se hacen cúmulos en el cielo, la gente dice que cuando esto sucede hay tristeza rondando, las nubes se rasgan como si una mano divina estuviera tratando de apuñarlas para desahogar con eso su sufrimiento. Era un día de enero en un verano más caluroso de lo habitual, el polvo se levantaba en pequeños remolinos mientras el sol castigaba la tierra árida de Nueva Concepción en Chalatenango, era un aburrido día mas de cuaresma en los que pareciera que la gente espera ansiosa la Semana Santa para recordar al hijo de Dios y olvidarse de él por el resto del año. Así son los preámbulos de la transición a la muerte, recuerden eso.

Daniel se despertó muy temprano, se despidió de su esposa e hijos, llamó a la puerta del cuarto de su madre, ella desde adentro gritó: -“¡ Que jodés vos, puta ya te dije que ya voy!”-. Doña Dora estaba lista también. Un día antes dejó todo listo para emprender el viaje.

El primo de Daniel le dijo: -“Por favor te apurás, no sabemos cuanto tiempo tenga”-, no era necesario el consejo ya que sabía la situación que los envolvía a ambos así que Daniel solo sacó un poco el brazo por la ventana de su pick-up mientras conducía, sostuvo su cabeza con su puño izquierdo y siguió pensando en tratar de resolver esto lo más pronto posible mientras contemplaba el amanecer en la campiña del norte del país, el cielo rojizo dejándose atrapar por el azul, con las plantaciones de maíz de verano, el olor a potreros, los árboles secados por los años y empolvados por los últimos vientos del norte antes del cambio de estación; él se acercaba a su pueblo.

Mientras tanto con los ojos entrecerrados, la respiración pausada y el ceño un tanto fruncido, se acababa de despertar Darío. Dejó escapar un pequeño suspiro mientras observaba por la ventana de la casa, las nubes en forma de surcos, ya faltaba poco para que llegaran todos, pero no dejaba de pensar en la llamada que recibió hace unas cuantas horas y la gran casualidad que ese mismo día tenía libre en el trabajo, como si todo hubiera sido una jugada del destino para que él regresara al país después de 20 años, aun había mucha gente esperando su regreso

Al llegar a la casa Daniel y su madre notaron que después de un año habían cosas que se mantenían igual, el muro de afuera seguía teniendo las mismas plantas enredadas, hace 20 años apenas era un cerco hecho de palos y alambre de púas, increíblemente la casa continuaba igual después de soportar un conflicto armado en una zona de mucha importancia histórica para estos hechos. Afuera de la casa estaban los niños jugando, eran todos los miembros pequeños de la familia, nueve niños todos nietos de Doña Dora.

En la pequeña sala aguardaban sus hermanos y primos. Con la llegada de ellos los miembros mayores de la familia Díaz estaban completos.

Al lado izquierdo junto a un pequeño retrato de su madre estaba su primo Mariano junto a su esposa, la cual había conocido hace 20 años después de sobrevivir a una matanza, él fue muy listo, junto a un amigo oyeron que las tropas se acercaban al cantón de Nueva Trinidad, como era la costumbre de nuestro flamante y orgulloso ejército al ver jóvenes tenían que reclutarlos, si se negaban era mejor verlos muertos que libres o como posibles enemigos. Por tanto Mariano y su amigo se ocultaron debajo de unos cadáveres que estaban en el camino, eran cinco personas que al parecer vivían cerca y al negarse a colaborar prefirieron morir en grupo, pero al primo no le importó eso aunque al final de que el ejército terminó de pasar sobre los cuerpos y ellos dos, agradeció profundamente la ayuda de los miembros de este humilde hogar.

Junto a Mariano estaba la hermana de Daniel, Lucila, la que había vivido 10 años en México trayéndose de allá muchas mañas acompañadas de un horrible acento mexicano que hasta la fecha no se le quita, como si a parte del tiempo, hubiera dejado su corazón allá, algo muy raro sabiendo que su esposo regresó con ella al país, aunque esto explicaría porque su hija menor es más morenita que el resto de sus hijos o porque cada vez que escucha una ranchera de Lucha Villa, un profundo y resquebrajado suspiro sale de lo más profundo de su ser.

A la derecha junto al espejo de la sala, estaba su primo Adrián, con el que solía jugar de pequeño atravesando el río Sumpul, tratando de pescar, viendo a las mujeres que se iban a bañar, haciendo carritos con hojas de café y ruedas con los granos. Ya hace mucho que no lo veía, desde que se fue a EU como mucha gente de su familia ya desesperados por la mala situación económica del país.

Al fondo estaba Marta, la sobrina de Doña Dora, una mujer que hace unos años había sufrido la pérdida de la más joven de sus hijas en un trágico accidente que conmocionó al pueblo, era apenas una adolescente, la consentida de la familia.

En ese momento se abrió la puerta del cuarto junto al espejo, lo que sorprendió a Adrián ya que no esperaba que hubiera despertado su hermano; pero era justo, Darío y Daniel eran una pareja inseparable de niños. Por antiguos pleitos familiares con la madre de Daniel, él era maltratado por una de las tías de Darío, siempre racionaba su comida, ensuciaba su ropa y lo incomodaba con frecuencia cuando éste lo iba a visitar; pero hay cosas que afortunadamente no se heredan, ellos dos siempre compartían todo, parecían hermanos. Por esa razón al crecer Daniel pagó tanta ingratitud a las señoras, permitiendo que el tipo que le vendió el terreno donde se levanta actualmente su casa, le vendiera a las señoras el terreno de junto, de no ser por él sus actuales vecinas estarían en la calle.

Darío se acercó a Daniel y a su madre, los abrazó a cada uno por separado, a ella no le gustaba compartir ni siquiera los abrazos. Los demás presentes se acercaron a saludarlos con mucho cariño a Daniel y con mucho cuidado a Doña Dora, todos sabían del temperamento de la señora, en otras culturas ella hubiera sido la matriarca de la tribu, toda sabiduría y dureza, era una señora que para su baja estatura gobernaba con su manera directa, ofensiva, burlesca e irreverente de hablar. Irónicamente cada grosería que salía de su boca causaba gracia y respeto entre la gente, una situación extraña cada vez que ella estaba cerca, insultaba a sus familiares y nadie salía herido, cualquier persona ajena al circulo familiar al ver esta escena solo podría pensar dos cosas: o sus parientes eran inmunes a sus improperios o realmente la señora los hipnotizaba al hablar. Como recibir una puteada en francés, sus insultos les sonaban preciosos…en español.

Ella les saludó a cada uno recetándoles frases como: -“Puta diablo, estás todo consumido, esa tu mujer no solo te ha dejado acabado, también no te da de hartar”- a Mariano, -“Buenas tardes hija, ¿y el bolo de tu marido no vino?, de seguro lo dejastes cuidando la tienda del marigüanero de tu hijo, está bueno”- a Lucila, -“Buenas tardes,, milagro que vinistes, pensé que no iban a dejar tus hijos”- a Marta, -“Buenas tardes hijo, ¿Cuándo vas a llegar por la casa, deberías de ir a ver a tu nana y a tu tía”- a Darío. Todos reían tímidamente a Doña Dora y le dedicaban frases como: -“Mamá no diga eso”-, -“Por eso la quiero tía”- o la frase más odiada para ella -“Aww la abuelita tan linda”- prefería ser llamada Abuela y nada más, ella confundía los diminutivos y palabras dulces con frases despectivas hacia su avanzada edad.

Pero hacía falta alguien, era Julio, el hermano de Mariano, estaba en el cuarto del fondo con la anfitriona de esta reunión.

Todos entraron a la habitación y se colocaron alrededor, aunque pequeña, había espacio suficiente para los invitados, al fondo estaba Julio sentado en una silla vieja de madera contando sus vivencias en EU, los trabajos que tuvo que tomar, las limitaciones que se encontró todo para mandarle dinero a su madre que yacía moribunda frente a él. Ahí estaba ella, acostada en la cama que recibía en su casa a sus parientes más queridos, Doña Isabela los miró a todos, al menos eso intentaba con las pocas fuerzas que le quedaban, se encontraba muy enferma de una pulmonía complicada debido a sus ya 89 años de edad; pero aun tenía energías para dedicarles un saludo a sus hijos y sobrinos mayores. Ella se levantó un poco ayudada por su hija Marta y de manera entrecortada con voz áspera dijo: –“Gracias por haber venido a todos, espero que se cuiden y sean felices cuando me vaya, por favor cuiden de mis nietos y biznietos”-. Al oírlo todos callaron.

Doña Dora se sentó suavemente en la cama y le tocó tiernamente la cara a Doña Isabela quien la miró, cerró los ojos y los volvió a abrir para decirle: -“Mi hermana, ¿Cómo has estado Dora? Vos te ves toda maciza y cholotona, mientras yo estoy toda calaveruda, y eso que sos más vieja deberías de estar toda consumida”-, después de decir esto tosió fuertemente. Doña Dora se metió en su papel de hermana mayor y le respondió: -“Dejá de hablar ya, te va a hacer más daño”-. Doña Isabela había comprendido que para ellas que vivieron muchas penas, desgracias, maltratos, desilusiones y demás desventuras, el tiempo se había detenido porque su hermana no miraba su cara deteriorada y esquelética, ni su cuello con la piel marcada por los años, ni su pecho que aprisionaba una respiración pausadamente forzada. Ella solo miraba a su hermanita, la pequeña, la que cargaba en sus brazos cuando su madre se lo exigía mientras lavaba la ropa, la que la ayudaba a recuperarse cuando su esposo la golpeaba, la que le creyó cuando le contó del encuentro fantasmagórico que tuvo en el río cargando a su hijo que por cierto era Daniel, la que simplemente ya no veía seguido y aun llevaba en su pensamiento. Ellas dos, las que sufrieron persecución al estallar la conocida Guerra de Cien Horas, las últimas sobrevivientes, los pilares de la familia entera.

Fueron apenas 5 minutos que para Doña Isabela resumieron toda su vida en una profunda mirada, ellas dos ya no necesitaban decirse más. Y así sucedió, solo aspiró aire en una bocanada, dio un gran suspiro y vio hacia arriba, como encomendándose a una gran fuerza celestial, llámenle Dios si así quieren. Cuando se detuvo, la respiración de todos en la habitación se había detenido, como si sus latidos se hubieran sincronizado, todos sabían lo que sucedía; pero nadie quería hacer la crucial pregunta.

Las mujeres estaban listas para soltar el llanto y los hombres trataban de hacerse los fuertes para no desmoronarse. Julio era el más cercano a la cama, con la cara palidecida se acercó para asegurarse de lo inevitable mientras todos miraban ya resignados, puso su mano sobre su nariz y tocó su cuello, inmediatamente miró a los demás y les dijo: -“Se ha quedado dormida, su respiración ha mejorado, talvez ya sea tiempo de dejarla descansar”-. Cada uno se despidió de Doña Isabela y salieron del cuarto, fue un momento que nadie olvidaría jamás, así pasó el resto del día y la noche sin más sorpresas.

Unos días después la Tía Isabela había vuelto a ser la misma, bromista, necia y gruñona de siempre que había gozado de una despedida en vida de sus familiares que se alegraban que estuviera de vuelta, aunque algunos estaban algo molestos por el susto y el drama creado, eran buenas noticias. Todo esto pasó en los primeros días de enero.

El 14 de febrero, Doña Isabela fallecía en su casa, al lado de sus hijos Julio y Marta, esta vez los agarró desprevenidos como suele suceder la vida y como suele suceder la muerte. Dicen que cuando llueve el alma del fallecido descansa en paz, extrañamente una pequeña llovizna cayó en tierras chalatecas el día de su entierro, en pleno verano de cuaresma. Doña Isabela partía a reunirse con su madre y sus demás seres amados que se le adelantaron, al menos me gusta pensar eso. Con todos sus seres queridos que se quedaron en este mundo para recordarla por siempre.

Les dije que recordaran algo, no lo olviden jamás.

PD.: Este relato es basado en una historia de la vida real

lunes, 24 de diciembre de 2007

Bienaventuranzas Para Navidad

Saludos a la comunidad blogger, después de estar otra vez desaparecido por mucho tiempo solo quiero desearles Feliz Navidad, Feliz Hannukah o Feliz Alter Party de Solsticio de Invierno, como sea lo importante es que la pasen bien y sigan visitando nuestro blog que no es el más bonito ni el más entretenido; pero sus colaboradores siempre tienen algo de basura mental necesaria de compartir con el mundo (a excepción de algunos que solo escribieron unas cuantas veces y se dieron a la fuga y solo están llenando espacio en la base de datos de blogger.com XD).

En este día...

Yo los quiero…

Saludar y desearles “Feliz Navidá”…

¿Está bien?....XD.

Y solo espero que cuando estén en lo mejor de hartar recuerden a toda esa gente que no tiene un día festivo que compartir con la familia, talvez sea porque no tienen familia, talvez la familia no los quiere, talvez llegaron tarde a la repartición de amigos, whatever.

Espero que cuando le peguen la mordida al chumpe, gallina india o civilizada o cualquier tipo de comida “piqui” recuerden al tipo en la granja que tuvo que alimentar al animal, soportar la peste de ese maldito olor y perder el gusto por la carne de crianza; ojala recuerden al tipo del camioncito repartidor que tuvo que andar a toda prisa como enajenado-loco distribuyendo todos esos cadáveres para que podamos cenar; pero no nos olvidemos también de la gente de los supermercados y centros comerciales que sufren turnos extenuantes de trabajo debido a que somos tan desorganizados con las habituales compras a ultima hora.

Espero que recuerden a toda esa gente para la cual esta fecha no será especial, porque talvez será una fecha como cualquier otra, porque talvez le rezan al Jesús-hombre, Sai Baba, Ronald McDonald, Maradona, Chuck Norris o cualquier otro tipo de deidad superior.

Espero que si por alguna razón los visitan fantasmas de navidades pasadas no terminen diciendo que ven gente muerta, piensen que talvez se intoxicaron con la comida.

Pero mi objetivo no es hacerlos sentir culpables, ohh no, para eso está la iglesia. Solo deseo que pasen unas buenas festividades y recuerden que aunque sea una fiesta montada para luchar contra las costumbres paganas de comienzo del invierno septentrional lo importante es aprovechar la oportunidad para regresar a nuestras raíces, regresar a casa, regresar a los días cuando todo era sencillo y hermoso.

En otras palabras…

-Feliz Navidad A Todos-

viernes, 21 de diciembre de 2007

Cosas que hacer en navidad, cuando se trabaja como loco

En primer lugar hola, y en segundo, hola igual

Existía en mi vida antes de trabajar ese hermoso espacio-tiempo llamado: libre, espacio muerto, la hueva absoluta en el cual no hacia nada y pensaba en hacer todo, ahora hago mucho y pienso poco como buena regla de oro es la de la fotografía: si tiene mucho de algo tieno poco de lo otro y viceversa, luego se los explico, pero bueno, un par de cosas que la mayoría de personas que nos dedicamos honradamente al día a día y querer llegar a una mañana tenemos que hacer cuando se nos dan 5 días de gracia como a mí, 5 y no más, pero no menos necesarios:

primeros dos días: dormir, como un demente, dormir como solo Dios durmío el día famoso que descanso, dormir de día joder de noche, porque la epoca lo amerita

tercer día: hacer lo que hace más de un año no hago, echarla puta!! por favor un día enmedio de todos, hechar la hueva como quien quiere olvidarse del mundo

cuarto día: dedicarme a hacer una wuevonada, que se yo, bajarme 9 gigas de pornografía, 20 manuales de como ocupar software, leer inciclopedia hasta que se me sequen los ojos, y si por ahí queda tiempo pasar con la familia, es de ver como no he incluido a nadie de la familia en estos 4 días, pero obviamente al salir del cuarto me encuentro como a dos ahí preguntandome acerca de ese famoso día de ir a hacer ejercicios, dejar de tomar cocacola o abandonar la pizza como mi segunda patria.

quinto día: preparme psicologicamente para el siguiente, iendo al cine, o a nosequecosas hacen uds. antes de chocar en la calle, una vez me pasó, fue increible que en 0.6 segundos lo unico que pensé fue: puta esta me va a salir cara, y luego Crashhh... poner cara de idiota y salir del carro.

Bueno, como comentario final les digo, la vida no es nada, es un simple ensayo sobre lo que hacemos el día a día. luego seguire hablando mas cosas

ciclos

estaba hace un tiempo viendo en algun canal educativo... si, esos q la mayoría de la gente no sintoniza por ver mtv (mier... tv, como dijera alguien en otro blog) y pues que en ese canal estaban hablando sobre los mayas, su calendario, su sistema matemático y el fin del mundo (no, no era el infinito) y pues... me di cuenta q ciertamente no estan muy perdidos, pq en resumidas cuentas, el ser humano como parte de la naturaleza (infección) ha venido incluyendo más ciclos a su vida de los que posee en el momento de su nacimiento, lo regular en un ser viviente es: nacer, comer, excretar, fornicar (luego abatirse), envejecer y morirse.

pero al ser humano c le ocurrió la estupenda idea de trabajar, viajar (desplazarse), ganar, gastar, regalar, comprar, robar, construir, inventar, fastidiar, fastidiarse, etc etc..

a que viene todo esto? a pues.. muy facil... es q ya no se q hacer para matar el tiempo mientras estoy en el trabajo XD creo q voy a empezar a comprar libros pq escuchar la misma cancion por la radio 10 veces al día solo q con distinto locutor (pq ni ellos soportan hacerlo) ya me esta empezando a caer por lo más bajo y redondo... XD (los riñones?)

y luego de remate, me traen o me entero de peores noticias... ejemplo: la bicha de smallvile, va a ser chun li en una pelicula unicamente sobre ese personaje de SF... ¬__¬ puts! a alguien peor no podian elegir? ¬__¬ no se q piensen muchos de uds, pero... chun li es trozo de bicha (no una semi asiatica cara de perrito atropellado del lugar mas desnutrido de oriente (asia pues, no sn miguel))... para mí... y pues, no es q hubiera sido la mejor solución, pero a más no haber... sikiera Misa Campo, pq... si o no? posee todas las caracteristicas del personaje de capcom? yo creo q hasta le sobraría 2 q 3 :P

bue... ya q me acordé de esta chamaca... :3 iré a buscar más pics y vids de ella

Salu2

miércoles, 19 de diciembre de 2007

FRUTA!!!

me kiero largar de este país ¬__¬ kien conoce un coyote?

si sigo aquí nunca voy a hacer nada q me satisfaga... nisikiera es por pisto pues, sino por el reto a ser mejor cada día q pasa,,, no seguir = o peor al día anterior como akí ¬¬

salu2

lunes, 17 de diciembre de 2007

robo a mano armada

cosas q le pasas a uno en la vida... compré un aparatejo por internet, me salio algo caro vea... y pues... dis q revisando las cuentas... me percaté que los intereses de la tarjeta con que compré ese asunto, estaban un tanto caros, por lo que me dí a ala tarea de investigar el % de intereses mensuales que me tocaría pagar...

pues, por internet, no dice nada de cuanto cobra kien extiende la tarjeta, pero seguí buscando y me encontré una investigación de la defensoría del consumidor, la cual dice, que la mayoría de las tarjetas de crédito cobran entre un 20 y 40% de intereses anuales...

DATO CURIOSO q la tarjeta con menor recargo de intereses, cobra el 0.66% mensual (7.92% al año) pero por los requisitos necesarios para adkirirse... solo c le ofrece a burgueses, extranjeros (con pisto) o magnates (nacionalizados) salvadoreños (ah y a nuestros padres de la patria), kienes reciben $5000 mensuales o más y una garantía.

en cambio, la tarjeta más cara cobra 48.96% al año y es ofrecida a la pleve o clase media ya q solo rekiere una firma y ganar $300 para arriba...

osea q! los señores bankeros, se aseguran de cobrarle menos a kienes tienen más ingresos (ellos mismos) pq, el grueso de la pobracion, gana de entre 150$ a 300$ mensuales


como kien dice, que mientras más recursos uno posea, menos se le kitaran ¬__¬ como vamos a ser iguales entonces...

lunes, 10 de diciembre de 2007

XD

estaba como de custumbre escuchando la scan... cuando dis k llegaron un par de grupos a mostrar su solidaridad y a tocar una su canción q habian hecho entre los 2...

XD y pues... no es por nada vea... no es q tenga algo en contra de su música... pero XD esa tontera sonaba como jingle para comercial de almacen (omnis..., sim.., m...x, la cura... etc etc)

Conste!!! YO no se de música "popular (pero me gusta un poco de sinfónica y después del anime ost he andado buscando música original de todo el mundo) y pues... como dije anteriormente es como q la mara aki c estanca con lo mismo con q tienen "exito" por 1ra vez... no c ve una evolución, no c ve la intención de nada (en este caso, no c escucha)

para este par de famosos XD FELICIDADES!.

P.D. tmb hablaron de la "fabulosa campaña de MD" ¬__¬ gente! la primera es grácia!... pero tener 3 años o más con la misma tontera! ¬__¬ creo q no le han llegado al precio para poner a trabajar "otra vez" la creatividad a esos bichos.

para ellos tmb FELIFICADES!.

jueves, 6 de diciembre de 2007

Cuatro Caminos

Camino 2. Este

Porque ya no hay más vida para los que se rinden antes que la muerte venga por ellos

Es diciembre, el que trae los atardeceres nostálgicos y esa brisa que entumece con la cual los espíritus que rondan la tierra se acercan más al pasado que dejaron al despedirse del mundo, de sus seres queridos, simplemente ya no se aferraron a la vida.

El viento sopla acariciando las bronceadas montañas, levantando el polvo, las hojas y los malos augurios. En la campiña salvadoreña se despejaba el cielo y solo se escuchaba el murmullo de los matorrales secos por el sol que ahora eran refrescados por la noche plena, solo se escuchaba el murmullo…y a lo lejos, gritos resonantes.

Era una noche estrellada cerca de las 10:00pm. de 1956, cuando Dora después de una fuerte pelea que para su suerte la dejó bien librada tuvo que abandonar su humilde casa de la campiña de Chalatenango cerca de Arcatao. Todo había salido bien, esta vez no estaba llena de moretones y golpes de su actual pareja, así que pudo irse de su casa con lo único valioso que aun poseía, su hijo más pequeño que apenas alcanzaba los cinco años.

La brisa arremolinaba las ramas de los árboles como lo hacía con el cabello de Dora, ella trataba de caminar con sus maltratadas sandalias en la polvorienta vereda al mismo tiempo que tomaba de la mano de su hijo que a tropezones le seguía la marcha. Juntos cruzaron los extensos matorrales, sembradíos y terrenos pedregosos rústicamente delimitados hasta llegar al ultimo punto que los alejaría de esos lamentables incidentes.

Dora sabía que había llegado a la mitad del trayecto a casa de su madre, al menos podrían dormir tranquilos unos cuantos días mientras pensaban como continuar. Ahí estaban ellos dos frente al punto más difícil, cruzar el río.

El río Sumpul fronterizo con Honduras se vuelve un río muy peligroso en ciertos tramos debido a su gran caudal, la época del año era la correcta para la abundante agua que alimentaba las siembras de maíz y fríjol de esta zona, pero desafortunadamente se convertía en un paisaje nada alentador para nuestra pareja.

Después de quedarse sin aire al ver como se reflejaba la luz de la luna en el río, aspiró profundamente, tomó a su hijo en brazos y se introdujo en el agua.

Lo que más preocupaba a Dora no era la profundidad, había cruzado muchas veces aunque ninguna ocasión se compara a esta, lo difícil de considerar eran las corrientes y la oscuridad latente; al menos eso pensó hasta que vió algo que le erizó la piel, enfrió su sangre y le cortó la respiración.

Al otro lado del río había una silueta tenebrosa que se mantenía. Parecía ser un hombre alto y muy corpulento montado en su caballo, como aguardando, como vigilando, parecía que la observaba desde la otra orilla mientras fumaba un puro, al menos eso es lo que ella suponía que podría explicar el humo que emanaba de su cabeza y ese olor, ese olor tan desagradable. El miedo que recorría a Dora se hacía más intenso cada segundo, solo podía pensar: ¿De donde apareció ese hombre? ¿Cómo llegó allí?, hace 3 minutos no estaba y no escuché ningún sonido de cascos, mas en este tierrero de piedras sueltas he visto a muchos burros y caballos pasar por aquí y se pueden adivinar el número de animales por el ruido que hacen.

Pero ya era tarde no podía regresarse, estaba en medio del río, volverse significaría arriesgarse a sufrir una paliza o un encuentro con cuatreros; pero continuar no era buena alternativa tampoco, el olor se hacía más fuerte a cada paso y la corriente empezaba a mostrar su inquietud.

Su hijo con los ojos entre cerrados se percató que su madre lo llevaba cargado en sus brazos, giró el cuello y vió el cabello de su madre; entonces preguntó: -¿Mama que es ese olor?- . A lo que su madre contestó: -No es nada, ha de ser en el rancho de Don Pablo que están cociendo algo, dormite ya, que ya vamos a llegar a donde tu abuela-. Pero la inquietud del infante le hizo preguntar: -Mama, ¿Quién es ese señor?- . A lo que su madre respondió: -Es Don Pedro que de seguro viene vigiar su terreno y le agarró la noche-. Para el niño que se sujetaba fuerte al hombro de su madre mientras ésta hacía lo posible por no ser arrastrada le pareció suficiente explicación para permanecer tranquilo y expectante; pero no dormido del todo.

El corazón le latía más fuerte como si se le fuera salir del pecho y el aire extrañamente se enrarecía con ese olor inundando la superficie del agua, con cada paso que daba ella se daba cuenta que estaba al borde del colapso,…ese hombre olía a azufre.

No supo si fue la peste que se esparcía o las ganas de gritar la que le inclinaron a empezar a llorar, pero lo hizo, impulsada por el pánico que le invadió al ver ese humo espeso que salía de la otra orilla y los ojos del hombre que la observaban con gran tino aun en la espesa noche, esos ojos no se apartaban de ella, esos ojos de rojo centellante que retaban al brillo de la luna.

Y ya estaba cerca de la orilla cuando el nivel de la corriente empezó a bajar, el caballo dio unos pasos hacia el río intentando acercarse a Dora, lo que provocó que ella se frenara con el agua a la altura de la mitad de las espinillas. Y el hombre misterioso se acercaba más y más. Cuando Dora lo tuvo a menos de 3 metros notó lo más espantoso, el hombre estiró el brazo para queriendo tomarla, la cara de Dora se llenó de terror a pesar de tener tan cerca de ese hombre no podía verle la cara, había demasiada oscuridad y no me refiero a la noche, era una oscuridad que salía del jinete.

Estaba a punto de gritar y entonces.

La mano del hombre le quedó frente a sus ojos, y vió directo a sus incandescentes ojos.

Un grito salió de ella: -Ahhhhh llevame, pero solo a mi!!!-

Pero las palabras jamás salieron de su boca, en un segundo el hombre se había echado hacia atrás, como si él hubiera visto algo más atemorizante, el caballo se alteró mucho y relinchó mientras se detenía en sus patas traseras. Dora vió venir lo peor, muerta atacada por un caballo. Solo abrazó con todas sus fuerzas a su hijo y se entregó a su destino.

El hombre retrocedió, se dio la vuelta y subió la cuesta del río a toda velocidad, una velocidad impensable para cualquier terrateniente experto en medio de ese terreno tan pedregoso el caballo parecía como si moliera la roca con cada zancada.

Dora no sabía como reaccionar, la alegría y el alivio no le cabía en el cuerpo, ya estaba demasiado cansada, solo podía pensar en seguir con su travesía.

Mientras subía la empinada cuesta que llevaba al río su mente estaba al borde de un colapso, mientras trataba de calmarse abrazaba a su hijo. Cuando sucedió lo impensable, esta vez podía escuchar el sonido de unos cascos que se acercaban hacia ella, vió hacia atrás y sus pupilas se dilataron al ver con terror que el jinete se aproximaba a toda velocidad. Pero ya no quiso correr ni gritar solo se quedó parada en medio de la vereda, no podía moverse con su niño en brazos y sus sandalias humedecidas, espero a tener al hombre frente a ella mientras el olor azufrado se hacía más fuerte.

El jinete quedó frente a ella y la brisa dejó de soplar, solo había silencio, como si él reinara sobre esa lúgubre quietud. Miró a la mujer y el puro que fumaba se puso al rojo vivo mientras chispas caían a su alrededor, Dora entre el brillo de las chispas y de la luna pudo descifrar una sonrisa en la cara del hombre, una horripilante sonrisa se dibujó en su cara. El jinete siguió se apartó de la presencia de Dora inmediatamente, y emprendió la subida por el cerro precipitadamente, cuando ella terminó de subir el cerro pensó que él la estaba esperando; pero no ocurrió, así como apareció así se desvaneció como si la brisa que comenzó a soplar de nuevo se lo hubiera llevado.

Una hora después Dora por fin llegó donde su madre, no podía hablar, solo hizo señas para que le quitaran a su hijo de sus brazos y lo recostaran, ella estaba entumecida. A la mañana siguiente su hijo se levantó temprano y se fue buscar a unos primos para jugar, su abuela en cambio se quedó cuidando a Dora ya que estaba prendida en fiebre y casi no hablaba, cuatro días después se recuperó por completo y contó la historia a su madre. La manera en que comenzó la historia empalideció la cara de la anciana: -¡Mamá no le miento, ese cipote me salvó, me le escapé al diablo!-.

Arte en El Salvador

Lo que El Salvador necesita artísticamente, más allá de la basura... aludiendo con "la basura", a todo aquello que se esta presentando actualmente y que literalmente es basura, recolectada a no más allá de 2 metros de nuestras puertas, o lugares de ocio (llámese centros comerciales, parques y más cerca el sillon de nuestra casa) por pseudo (no c si ya se puede escribir seudo) artístas que "ven en las limitantes una oportunidad".

Y Aburrido, astiado, HARTO! (o jarto!) de ver la mísma plástica "indígena" (indigente, con mis respetos a los que ejercen esta profesión)... "el sufrimiento plasmado en el lienzo llamado abstractísmo mágico de formas sin forma que van más allá de por aquí cerca y demás chistes de pepito"... me he dado a la tarea de investigar, de reflexionar sobre los origenes de El Salvador, sus representatividades, la ideosincracía de nuestra gente... y espero!!! digo: ESPERO!!!, pasar o encontrar más que cajas de pizza, pollo campero, bolsas de amburquesas y demás porquería q apilarlas; indios deformes multicolores, en chozas o casuchas y perros escondiendo sus deposiciones del ojo espectador y que me digan "sos un génio" (con acento argentino) y peor aún, que yo me lo crea XD


Entonces y para empezar, de que dispongo:

La denominación geográfica de El Salvador - el pulgarcito de américa - porqué somos tan pequeños? alguina vez se lo han preguntado... más a llá del porque los catrachos y nicas tengan tanto terreno, los chapines no c quedan atrás.... entonces... pq somos tan pequeños??? yo pregunto:

Yo en lo particular, tengo 2 hipótesis: de seguro y sea por genética; los pobladores de este país siempre han sido perezosos... y la 2.a y que es peor aún, El Salvador es así de grande pq nos han obligado a vivir juntos, de no ser asi, cada 2 o 3 departamentos (a lo mucho) serían su própio país.

Por lo tonto (o tanto, como + les guste) un punto muy importante a señalar, es la poca identidad de grupo, masa, pueblo o nación que el salvadoreño de pura sangre posee.

Esta, le abre paso a otra catacterística guanaca y que residen en la mísma semilla del punto anterior y es que: SOMOS INGENUOS!!!... (o seremos conformistas (ver punto 4 o 5, da igual))
y tal como en la conquistay por la poca importancia que le damos a nuestra própia sociedad, le creemos cualquier cosa a cualquiera, siempre y cuando nuestra credulidad sea premiada con algo a cambio y por supuesto, que ese algo sea tangible al grado sumo de poder tocarlo con nuestras própias manos y mejor aún, lo podamos meter en nuestros bolsillos (ahhh que habría sido del selvadoreño en la edad de piedra o precolombina!!! sin las divinas matatas), dicho sea de paso, que si ese algo no se nos dá de inmediato, nuestro ofertante corre el peligro que volteemos hacia otro lado y agarremos la chuchería más proxima y nos distrigamos.

Pero... que nos quiere decir eso? fácil: que mientras más digerida o menos tengamos que preocuparnos en pensar sobre el tema en discusión, más atractivo se nos hace... se nota que no hemos avanzado mucho desde cuando nos regalaron un precioso y brillante espejo a cambio de un insignificante canastón de oro.

Hasta el momento, ya conseguí un par de puntos muy claron, dificilmente refutables... claro siemre y cuando intente convencer a un observador neutro, pq este le abre paso a una más de nuestras características, totalmente salvadoreña: "la necedad" alias nuestra testarudez, esa característica que nos ha dado a conocer a nivel mundial...

Bien podría asegurar y sintemor a quivocarme (en lo más absoluto) (e irrefutablemente) q el salvadoreño de pura raza debe estar pensando q soy un completo ignorante q todo cuanto he escrito es una falacia (mentira) pq la verdad es que: "somos, laboriosos, valientes y abnegados" (tal como c nos ha vendido (sin dificultad) la idea (muy digerida y sencilla por cierto).

(-. como muchos de mis temas este va a quedar inconcluso, pq kien haya soportado leer hasta aki (de seguro y no es salvadoreño, pq -los salvadoreños no leemos-, vemos el discovery channel, el nat geo o las noticias por la sagrada y divina TV / y por lo tanto, ya se debieron largar .-)

miércoles, 5 de diciembre de 2007

Cuatro Caminos

Camino 1. Oeste

Porque la vida es cruel, la gente se va, los buenos momentos pasan, el tiempo no perdona aunque Dios lo haga

Tanto sol, mucho sol para un día típico de mayo cuando el olor a tierra mojada, chicharras al borde de la agonía y zompopos característicos del mes. Estos son solo detalles que preparan a la gente para el invierno lluvioso, es lo mismo que divertía a Dalia, era un día que en su particular modo de vida le encantaba porque significaba que podría pasar más tiempo con sus amigos, su familia y alguien más.

Eran un poco más de las 6:40pm en su reloj, un pequeño regalo de su madre cuando regresó de Estados Unidos donde vivió un tiempo como muchos de nuestros compatriotas. Su familia se preparaba para visitar la iglesia.

Dalia tenía mucho que hacer esta noche, después de la iglesia habría reunión de grupo juvenil; pero este día no era especial por eso, con todos en un mismo lugar ella podría dar un paseo por el pueblo, había alguien a quien ella quería visitar.

Las calles vacías parecían enfriar a lo lejos del calor de la tarde, eran 32° una temperatura típica de la estación y de la ciudad de Nueva Concepción con tanta humedad cualquiera se asfixiaría corriendo; pero eso no detendría a Dalia y a su fiel bicicleta que tantas veces anteriores le sirvió de cómplice en sus escapadas.

Al salir de la iglesia dijo a su madre: -Ya vengo, voy al grupo juvenil-. Su madre le dijo: -¿Pero para que vas a salir ahorita?, está haciendo mucho calor-. Lo cual no detuvo a la joven que salió con mucha prisa, recorrió las calles del pueblo, era muy conocida por la gente que la veía con mucho cariño, ella era la niña bonita de la familia, la consentida de todos.

A sus cortos 16 años escuchaba con atención lo que los demás le decían, que tenía mucho futuro por delante, mucho que vivir, mucho por hacer; como típica adolescente todas esas voces en su cabeza solo la confundían cuando apenas estaba tratando de asimilar su edad y sus ganas de vivir intensamente.

Dalia iba observando con mucho cuidado las calles, a pesar de ser un pueblo habitualmente tranquilo y hasta cierto punto aburrido donde los días se van y otros vienen con leves variaciones solo en las fiestas patronales no era malo tomar las precauciones pertinentes.

Ya se acercaba al lugar, era la hora en que visitaría a su persona especial, a su novio. Como típico romance de adolescentes, sin permiso de padres, sin compromisos reales, sin responsabilidades y con muchas idioteces. Siempre he considerado que hay normas de conducta que no cambian jamás, si aprendes a ocultar tus secretos cuando tienes 16 años, seguirás ocultando cosas hasta tus divorcios o tus últimos días.

Dalia vió que se abría la puerta de la casa de su novio, miró su reloj que marcaba las 8:40pm lo que significaba que había llegado demasiado temprano a su reunión; pero la impaciencia es una característica inherente a esta edad, algo que debe corregirse, fue algo que a ella no le advirtieron.

Dalia levantó la vista y miró a su novio salir de la casa, con otra muchacha que precisamente ella ya conocía. Talvez pudo soportar aquella escena si el propósito de aquella apresurada cita no hubiera sido arreglar un pleito que habían tenido un día antes, ahora se daba cuenta que no había nada que arreglar, su relación ya se había roto desde antes del pleito y como suele ocurrir al estar enamorada, no quería ver la realidad.

Inmediatamente sintió el dolor característico de cuando te rompen el corazón, porque no se siente el dolor en el pecho, se siente el golpe en el estómago, la garganta que ahoga un quejido y los ojos que empiezan a humedecerse. Ella no soportó más y al ver que él se dirigía a tratar de explicarle se giró en su vehículo de dos ruedas y emprendió la escapada, ya no había nada que hablar, nada que entender, solo quería alejarse lo más rápido posible.

Mientras conducía su vista se nublaba y su llanto se ahogaba al tratar de respirar para mantener la velocidad exagerada que llevaba. Muchos adolescentes después de recibir tal decepción piensan en el suicidio, algo muy común en una edad llena de tanta incertidumbre; en cambio Dalia no pensaba, solo pedaleaba más y más rápido esperando ver la luz de su casa, y realmente vió la luz en un cruce de calle.

Eran las 9:30pm cuando llamaron a su padre, un amigo le daba una noticia que hico que le temblaran las piernas y se pusiera pálido de pies a cabeza. Su hija había tenido un accidente, y por el tono desquebrajado de su voz al escuchar la noticia la madre de Dalia se dio cuenta que algo espantoso le había ocurrido.

La escena era horrible, al parecer un automóvil se conducía a exceso de velocidad por un individuo en una condición deplorable intoxicado por el alcohol y las drogas, había arrollado a Dalia con un impacto tal que la joven salió disparada con toda y bicicleta a varios metros de distancia. No tuvo reacción alguna, no vió venir el golpe, había tenido demasiadas emociones para una sola noche.

Rápidamente la llevaron a la clínica más cercana. Media hora después el padre de Dalia fue informado por el doctor de turno entre la típica palabrería médica, su hija presentaba múltiples traumatismos, a parte de perder mucha sangre tenía huesos rotos en sus extremidades, columna vertebral prácticamente molida y un severo traumatismo craneal, realmente casi se había partido la cabeza en dos. Hasta que la muerte se apiadó de ella y la hizo cruzar al más allá.

Dalia murió cuando el reloj de la clínica de Nueva Concepción marcaba 10:40pm. Y un llanto inconsolable se apoderó de todos sus seres queridos. El funeral estuvo lleno de personas de la ciudad, ella era realmente muy querida, era la niña consentida de todos. El culpable de su muerte fue encarcelado, enjuiciado y después liberado, como otro acto vil en el cual el dinero vale más que la justicia, nunca pensé que años después me enterearía que un amigo mío era primo de este tipo (verdad Blog Admin). Su ex-novio pasó mucho tiempo traumatizado, la culpa era demasiada grande, al final el cinismo es un buen sedante para aliviar el dolor.

Años han pasado desde esa tragedia que enlutó a una familia y a una ciudad; pero aun se siente la pena. Existe un mito en la familia que al momento que ocurrió el accidente una persona se acercó a auxiliar a Dalia pudo observar en su cara las lágrimas que se deslizaban de sus ojos cafés medio cerrados y una sonrisa que delataba una profunda desilusión.

PD: Esta historia está basada en hechos reales, los nombres han sido cambiados.